En Tlanchinol, Hidalgo, las autoridades respondieron a un llamado de auxilio para despejar un derrumbe de tierra y ramas de árboles que obstruyó uno de los carriles de la carretera federal México-Tampico, específicamente en el kilómetro 153, cerca del poblado de Quetzaltenango. Vecinos de la zona solicitaron asistencia para limpiar y despejar la vía.
Baltazar Concepción Catalino, titular de Protección Civil de Tlanchinol, coordinó los esfuerzos y, al ver la magnitud del problema, se solicitó el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) y miembros del 84° batallón de infantería. Estos equipos se unieron para trabajar en la restauración de esta importante vía de comunicación que conecta la Sierra Alta con la Huasteca Hidalguense.
La operación de despeje se extendió durante cinco horas, y se utilizó un camión para transportar los escombros a un lugar seguro. Mientras tanto, los agentes de la Policía Municipal de Tlanchinol y la Guardia Nacional división caminos supervisaron el tráfico en este punto, evitando así posibles accidentes entre vehículos particulares y transporte público que transita por esta área montañosa.
El funcionario municipal también hizo un llamado a los conductores a extremar precauciones, especialmente durante las lluvias nocturnas y matutinas, que provocan el reblandecimiento de los cerros y pueden desencadenar deslizamientos de tierra y rocas en la carretera que conduce hacia la capital del estado.
